_[Lc 23:56] descansaron el día de reposo, conforme al mandamiento.
En la dispensación de la ley, el reposo era un dia, en la dispensación de la gracia, el reposo es una persona, Jesucristo (Mt 11:28). La palabra reposo aqui es (sábatton), es una palabra griega la cual proviene del hebreo (sabát) la cual significa: dia de reposo, esto denota: abtenerse de obras personales o distracciónes seculares . Se entiende que: el esfuerzo propio debe detenerse. En la antiguedad se efectuaba en un dia especifico de la semana, en este tiempo presente nos da a entender que el reposo total de nuestras propias obras, es Cristo Mismo (Efe 2:9). En si nos dice que el reposo es: apoyarnos sobre, encima de. Cristo debe ser la base creyente, para que el mismo pueda descansar correctamente y seguro (1 Cor 3:10-11). La palabra mandamiento viene del griego (entolé) lo cual es: orden, prescripción autoritativa. Esto denota: obedecer la orden de quien la da, reconociendo Su dominio. Temerle (respetarle - reverenciarle) nos lleva a amoldarnos a su mandamiento, a obedecerle. El temor del creyente (seguro) es una confianza reverencial, acompañada de repudio a la maldad (Sal 130:4). El temor de Dios es aborrecer el mal (Prv 8:13, Tit 2:11-12). La gracia desaparece todos los síntomas, da seguridad y no nos mantiene en incógnita. La verdad de la seguridad en Cristo mantiene al creyente firme en medio del proceso de crecimiento. Es el creyente inseguro quien naturalmente es inestable y anda en busca de una (experiencia) a otra, nunca aprende y por tanto nunca es afirmado en la verdad. Descansar en nuestra posición eterna nos libra del esfuerzo propio, inútil y pecaminoso que trata de hacer nuestra condición la base de nuestra seguridad. Al permanecer (vivir) en Cristo tenemos la firmeza de fe necesaria para que el Espíritu Santo lleve a cabo Su ministerio de gracia dentro de nosotros y produce que crezcamos en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo (2 Pd 3:18). Ciertamente todavía no se ha manifestado en nuestra condición (terrenal) lo que ya somos en nuestra posición (celestial), o lo que seremos cuando El aparezca. El creyente que reposa en Cristo sabe que esta seguro eternamente (Col 3:3-4, Rom 5:11). El creyente que descansa en la soberanía de Dios sabe que está seguro eternamente (Rom 8:29-30, Jud 1:24). El creyente que descansa en la justicia de Dios sabe que está eternamente seguro (Rom 3:26, 1 Pd 3:18, Rom 8:1-2). El creyente que descansa en la voluntad de Dios sabe que está eternamente seguro (Juan 15:16, 1 Cor 1:30). El creyente que descansa en el amor de Dios sabe que está seguro eternamente (Jer 31:3). ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución? … Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro. (Rom 8:35, v.38-39).
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_[Jn 6:35] Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
Nuestra provisión es mas que Sus obras, nuestro sustento es mas que Su provición, es Su persona. ( Yo soy el pan de vida - Jn 6:48). La palabra (sustento) viene del original hebreo (tamák) la cual significa: sostener, ayudar, alimentar, denota: un apego inquebrantable, {eje}: Cuando una persona tiene hambre, solamente se puede calmar la misma con una solución alimenticia. Una vez que estamos seguros por la Escritura ( Biblia) de nuestra justificación, reconciliación y aceptación en el Señor Jesús, nos toca alimentarnos sobre la base veridica de que estamos completos en El. Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo [por fe], andad en él (Col 2:6): arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias (Col 2:7)… Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad (Col 2:9), y vosotros estáis completos en él (Col 2:10). Todo creyente comparte las virtudes de Cristo, pero, ¿por que no todos viven en este estadar de vida celestial elevado?, el problema no está en el proveedor o la provisión, sino en el creyente necesitado que no se apropia de lo que ya fué provisto. Debemos entender que de la misma manera en la cual Dios nunca necesitó una inspiración externa para crear todo, sino que se inspiró en Si Mismo (Col 1:15-16), El provee todo en Si Mismo para El creyente de tal manera que no halla necesidad alguna de alimentarnos en otro recurso que no sea El Mismo. Cristo es nuestro sustento y satisfación eterna, descendía del cielo, de Dios (Ap 21:10). Todo lo que siempre necesitaremos para nuestra vida cristiana, ahora y en la eternidad, está listo y esperando en el Señor Jesús, completo y accesible. Nuestra condición depende absolutamente en nuestra Fuente completa ( Jesucristo). La fe descansa sobre el testimonio escritural de nuestro Padre de lo que El ya ha hecho por y con nosotros en Cristo, nunca sobre lo que El esta haciendo por y con nosotros en nuestra condición presente. La fe en la Vid produce fruto en los pámpanos (Jn 15:4-5). El reposo en nuestra posición ( Celestial) en el Señor Jesús tiene un efecto directo sobre nuestra condición (Terrenal). Cuando sabemos que nuestro Padre ya nos ha hecho completos en Cristo, podemos confiar en El en medio del desarrollo de estar completos en nuestra condición espiritual. Sin el conocimiento de esta obra completa en la persona del Señor Jesús, a nuestra fe le faltará la confianza necesaria de que El se asegurará de que el progreso en nuestro crecimiento sea diario (Fil 1:6). Serás como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae ( Sal 1:3). El Sustenta tus pasos en Sus caminos, para que tus pies no resbalen (Sal 17:5). _[1 Cor 15:10] Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.
La raiz de un concepto personal elevado es el enfoque servicial egoista. La palabra (gracia) viene del griego (jaris/caris) la cual significa: influencia Divina sobre el corazón humano y Su reflejo en la vida. Es to denota: el favor de Dios en aquél que no lo merece. Debemos reconocer que todo lo que ahora somos, lo somos por la gracia de Dios. Si tenemos algo es por que El nos lo ha brindado, el profeta profetiza porque palabra profetica le fué expresada, el maestro enseña porque en la sabiduria fue instruido, el predicador exhorta porque palabra le es hablada, y el musico toca porque las melodias le han sido inspiradas, en otras palabras, si algo tenemos o hacemos para Dios es por que El mismo nos reparte de Su gracia y poder para hacerlo, es El quien da la facultád de actuar bajo Su orden. La verdadera devoción y comunión con Dios estan basadas en que mediante la Persona del Hijo (Jesucristo) tenemos la gracia suficiente para conocerle, servirle y agradarle asi como El lo ejemplificó (1 Cor 1:9, Mt 3:17, Jn 5:30). El verdadero servicio cristiano se establece en hacer lo que El ordena (Hch 22:10), y no lo que nosostros pensamos o creemos que es correcto hacer para Dios (Hch 26:9-12), e incluso hacer o hablar como otros, fuera del tiempo correcto de Dios y de Su orden (Hch 9:20-22). Su gracia <<No ha sido en vano>> para con nosotros, Dios el cual es rico en misericordia no solo nos lleva a servirle, sino que El mismo es quien nos capacita mediante Su persona, el Espiritu Santo, para hacerlo correctamente conforme a las Escrituras (1 Tim 3:16-17). El verdadero servicio a Dios es aquel el cual, El es la atención y no el servicio brindado, es el Espiritu Santo quien nos lleva en el servicio a glorificar al Hijo (Jesucristo), y al mismo tiempo nos lleva a conocer Su deseo. No podemos servile eficazmente sino le conocemos claramente (Jn 16:14), El nos muestra todo acerca de Si Mismo mediante SU medio plenamente inspirado y escrito (Lc 24:44-45, Jn 14:26, 2 Pd 1:19-21). Si hemos trabajado o hecho algo para el Señor, en lo cual entendemos que es mas preciado que el trabajo ajeno, debemos entender que no fuimos nosotros, <<sino la gracia de DIos con nosotros>> Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento. Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor. Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios. Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica. Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo (1 Cor 3:7-11). _[Jer 43:2] Todos los varones soberbios dijeron... Mentira dices; no te ha enviado Jehová nuestro Dios para decir: No vayáis.
El soberbio todo lo sabe, todo lo entiende y no necesita ser instruido y dirigido en ninguna area de su vida. Hay un punto muy importante que se debe tomar en cuenta cuando Dios habla a nuestras vidas, a demás de que El habla para bienestar propio y dirección para Su pleno agrado lo que debemos tener como importante es: (un corazón contrito y humillado) el cuál Dios no desprecia (Sal 51:17). La Palabra (contrito) viene del hebreo (daká) y significa: derrumbado, quebrantado, raiz prima de (dak) lo cual es: arrepentimiento. Una persona que reconoce su falta recibe el glorioso beneficio del perdón, la gracia o favor de Dios derramada sobre aquel que derrumba su fortaleza propia con sus motivaciones egoistas. El soberbio No tiene: gracia, unción y sabiduria divina la cual lleva a la dirección correcta del Espiritu Santo, y todo por que: Dios resiste (se opone) a los soberbios, pero el humillado de corazón Dios le dá gracia para estar revestido de humildad (1 Pd 5:5). Además de tener un corazón (contrito - arrepentido) debemos tener un corazón (humillado), la palabra (humillado) viene del hebreo (shabár) y es: fracturado, perniquebrado, roto, denota: el reconocimiento total de una persona de su incapacidad para lograr algo por si mismo. La verdadera auto-humillación es un reconocimiento de que no tenemos las cualidades o capacidades personales para efectuar Su propósito glorioso (Jn 15:5), el reconocimiento de ello nos lleva a un recibimiento ante El por medio de Su Hijo y un depósito de Su gracia o favor inmerecido hacia nosotros. Aquel que cree que todo lo sabe y que no necesita aprender está atorado (Heb 5:12), esto denota la ilustración de un rio el cual sus aguas fluyen, el mismo aliementa su habitad al rededor, da crecimiento, reparte la vida que hay en el, pero, ¿que sucede si se dificulta el paso del agua?, no da crecimiento, no esparce la vida la cual llevaba y por lo tanto sus aguas no serán de utilidad como lo eran antes, creará pudedumbre y el crecimiento a su alrededor no se llevará a cabo. Tal persona esta nublada y en realidad no conoce absolutamente nada. ¿Como lo podemos ver? Sencillamente por el reflejo de su vida y comunión distorcionada, el mismo cree tener comunión con Dios cuando realmente no es así, Su pacto es revelado a aquel que le teme, y aquel que le teme vive humillado ante El, no en soberbia (Sal 25:14). Tales personas por Su soberbia la cual los lleva a que Dios se les oponga, no escuchan la voz de Dios ni Su consejo divino (Sal 10:4), por que todo cree que lo sabe, todo cree que lo entiende y todo lo conoce, tales soberbios por su entendimiento nublado acosan a los demás y son maltratantes (Sal 10:2), lo opuesto a Jesucristo. Tales arrogantes pueden saber todo el contexto historico y cronologico de la Biblia, e incluso pueden saber todo acerca de lo Cristo hizo y experimentó en Su quebranto vicario. Pero, lamentablemente no conocen a Cristo, como todo lo saben no necesitan aprender de nadie: aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas (Mt 11:29). _[1 Jn 4:8] El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor.
El afecto no es valido hasta que se expresa. La palabra amor viene del griego (agapao), y el correspondiente nombre (agape) constituyen la característica del cristianismo. agape y agapao Se usan en diferentes ocaciones para describir la actitud de Dios y para expresar su voluntad a sus hijos con respecto a la actitud que tienen que mostrarse mutuamente (Jn 13:34), y para expresar la naturaleza esencial de Dios (1 Jn 4:8). El que no Ama no lo conoce y nunca lo conoció; no ha conocido a Dios tal como es. Dios es amor no podemos traducir el amor es Dios, Dios es fundamental y esencialmente AMOR; no solamente ama, pues en tal caso el argumento Bíblico no quedaría en pie. Pero cuando tomamos el amor como la esencia de Dios, el argumento es firme. Dios es más que las relaciones que experimentamos en la vida. El que no ama no ha conocido a Dios. La razón por la cual ocurre esto constituye una de las grandes afirmaciones de la Biblia de que El es amor. Esto tiene un significado más profundo que el decir “Dios ama”. Dios ama no porque encuentra objetos merecedores de su amor, sino porque el amar es su naturaleza. Su amor por nosotros no depende de lo que somos sino de lo que es El. Nos ama porque El es esa clase de Dios, El es amor. El Espíritu de Dios es el Espíritu de amor (Rom 5:5). El que no ama a la imagen de Dios en Su pueblo (Creyentes), no tiene conocimiento de Dios (1 Jn 4:20). El cristiano que ama es el cristiano perfecto; póngalo en cualquier deber bueno y es perfecto para eso, es experto en eso, el amor es útil. Por amor a Él, el creyente detesta el pecado y todo lo que no concuerde con Su voluntad incluyendo el no amar a los demás, y tiene el deseo sano de todo corazón de hacer Su voluntad, lo cual incluye amar a los demás. El mundo, con su visión egoísta del amor, ha tergiversado esas palabras y ha contaminado la comprensión real del amor. El mundo piensa que amor es lo que nos hace sentir bien, y está dispuesto a sacrificar principios morales y los derechos de los demás a fin de obtener dicho "amor". Pero en realidad eso no es amor, sino todo lo contrario; es egoísmo. El verdadero amor es: santo, justo y perfecto. Si en verdad conocemos a Dios, debemos amar como El ama (1 Jn 2:6). Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy (1 Cor 13:2). _[Gál 5:8-9] Esta persuasión no procede de aquel que os llama. Un poco de levadura leuda toda la masa.Tal cual sea nuestra convicción, así sera nuestra expresión. Conforme a lo que creemos, así viviremos.
El legalizmo no es una enseñanza Divina. La palabra persuasión significa: (creencia o doctrina). Aquel que os llama se refiere a Dios. Todo aquello que se enseñe como base externa para alcanzar la gracia de Dios fuera de la fe, no procede de Dios mismo, es decir, agregar metodos, formas y cláusulas personales para alcanzar el propósito Divino es totalmente diabólico (Rom 11:6). Tal enseñanza va enfocada en la aliemntación personal del (yo) y no en la exaltación glorificada de Jesucristo (Efe 2:9). Dios no es deudor de nadie, si el hombre tuviese parte en algo que es completamente divino, entonces Dios seria deudor a medias del hombre por tener parte en Su plan perfecto, soberano y eterno. El legalismo conduce a males mayores y en aumento, la levadura en la Escritura es un simbolo común de mál. Aqui se refiere a la naturaleza de la doctrina de (fe mas obras) para llegar a Dios. La tendencia natural de la levadura es afectar a toda la masa, aqui se usa para mostrar que un poco de error conduce inebitablemente a errores mayores. El mál nunca es estatico. Defiende sus mentiras añadiendo más mentiras, el legalismo es como una plaga enfermiza que se extiende hasta contaminar a toda una población, cuando comienza a crecer no se detiene y se expande hasta afectar a todos, y llega a su fin cuando se encuentra un antidoto que le detenga. Si unos pocos en una iglesia mantienen una falsa doctrina, los tales conseguirán más y más seguidores, a no ser que sea confrontada su herejia con severidad y verdad. Este testimonio es verdadero; por tanto, repréndelos duramente, para que sean sanos en la fe, no atendiendo a fábulas... ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad (Tit 1:13-14). Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud (Gál 5:1). _[Mr 11:22] Tened fe en Dios.
No es lo mismo conocer de una persona que conocer a una persona. Hay una Palabra clave para darnos a entender como Dios opera y esta es: (Imposible), la Palabra Imposible viene del griego {adúnatos} significa: incapaz, restringido, da a entender cuando una persona se limita por no tener los recursos suficientes para hacer algo. Hay un dicho muy común entre los creyentes: porque nada hay imposible para Dios (Lc 1:37), pero, ¿porque en el momento de aflicción y desaliento no lo dicen con esa convicción como están acostumbrados a hacer?, la sencilla razón esta en que conocen de la Persona pero no conocen a la Persona, al conocer a Jesucristo y no tan solo conocer de El, lo primero que debemos hacer es depositarnos en Su propia Persona y por subsiguiente en Su fidelidad bendita, reconociendo que hay dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta (Heb 6:18). Viendo ya que es (incapaz, restringido) imposible que mienta, podemos entoces vivir en fe, sabiendo que Dios, pues, suplirá todo... conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús (Fil 4:19). Debemos descansar en la Persona (Mt 11:28), para luego descansar en Sus promesas (Fil 3:12). Si no se conoce a la Persona ¿Como esperaremos lo que promete?, de ninguna manera, si usted conoce a una persona mentirosa la cual le promete algo usted estará seguro que no se hara lo que el tal promete por que conoce a tal persona, al igual si conoce a una persona fiel y dedicada la cual le promete algo usted estara seguro que recibirá lo prometido por que le conoce, de la misma manera con el Señor Jesús, si no le conocemos ¿como esperaremos lo que El promete?. No serán condenados cuantos en Él confían (Sal 34:22). Solo podemos confiar en el Padre al grado en que le conocemos. Y Él se revela a Sí mismo a nosotros por Sus medios. Esto es por la Palabra (Lc 24:44-45, Hch 18:28 ), por el Espíritu (1 Co 2:10, Jn 16:14), y por Su Hijo Jesucristo (Jn 14:7). Somos llamados a la comunión con Dios (1 Cor 1:9), y significa felicidad común, pensamiento común, y confianza común. El deleite del Padre está en Su Hijo. La delicia del Hijo está en el Padre, tenemos comunión con Él en eso. Debemos creer en El para luego creerle a El. El Señor se goza en aquel que sin duda alguna se deposita en El. Sin fe es imposible agradar a Dios (Heb 11:6). _[Mt 22:29] Erráis, ignorando las Escrituras y el poder de Dios.
La Palabra escrita es para reveler la Palabra Viviente, no para esconderlo a El (Lc 24:44-45). Muchos conocen la profecía más que al Profeta. El dio Su Palabra escrita para que conozcamos a Su Hijo como nuestra Vida. El conocer al Señor es la base de la vida del creyente. La clave para el crecimiento no es conocer la Biblia, sino conocer a Cristo por medio de ella, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido (1 Co 2:12). Y de esa manera crecemos en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo (2 Pd 3:18). Si no conocemos la Biblia como la misma Palabra de Dios, todo esta perdido (2 Tim 3:16-17, 2 Pd 1:19-21). ¿Dónde hemos aprendido algo acerca del Señor claramente? debemos ser no solo expositores de la verdad, sino exponentes de ella (Gal 1:24). No es solo poder describirla, o ponerla en el orden correcto, sino tener esa palabra para nuestra propia vida por el Espíritu Santo el cual nos enseña todas las cosas, y nos recuerda todo (Jn 14:26). El error es pensar que porque podemos describir una verdad, ya por eso la hemos aprendido. No es describir una verdad, Sino vivir en y por la Verdad (Jn 14:6, 17:17), El proposito de ello es revelar a su Hijo en nosotros (Gál 1:15-16). No hay mayor demostración del poder de Dios en la vida de un creyente que el Espiritu Santo aplicando la vida de Cristo en nosotros mediante Su Palabra. Y así podremos decir: ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí (Gál 2:20). |