«Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Pues una rama no puede producir fruto si la cortan de la vid, y ustedes tampoco pueden ser fructíferos a menos que permanezcan en mí - Juan 15:4 (NTV)».
“La vieja vida es una rama muerta, y no puede permanecer en el Señor Jesús.” “Nuestra vida nueva es un espíritu (unión) con Él: un pámpano vivo que permanece en la Vid Verdadera. A medida que aprendemos a descansar en este hecho de nuestra nueva posición en Él; el permanecer llega a ser nuestra actitud de reposo.” “El camino a través del desierto debe ser áspero; y está bien que sea así; porque no existe una persona con mente lucida que no prefiera estar en lo áspero en lugar de un camino "resbaladizo". El Señor ve nuestra necesidad de ser ejercitados en lo áspero y en lo duro, no solo para que podamos encontrar descanso más dulce al final, sino para que podamos ser más eficazmente entrenados y preparados para el lugar que todavía no ocupamos.” “Como un pámpano cada creyente está unido directamente a la Vid Verdadera, quien recibe todas las cosas necesarias a través del cuidado del gran Labrador (el Padre) en persona. Él entrenará y sostendrá a cada pámpano individualmente, las necesidades de cada uno están sobre su corazón. El pámpano unido a la Vid no se preocupa, ni trabaja arduamente, ni se apresura a buscar la luz del sol, ni se precipita a encontrar lluvia. No, sólo descansa en unión y comunión con la Vid; y en el tiempo correcto, y de la manera correcta, se hallará fruto en él. Permanezcamos de esta manera en el Señor.” «Ciertamente, yo soy la vid; ustedes son las ramas. Los que permanecen en mí y yo en ellos producirán mucho fruto porque, separados de mí, no pueden hacer nada - Juan 15:5 (NTV)».
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«Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús - Fil 2:5 (NTV)».
"Los grandes momentos de la vida se desarrollan a partir de simples actos de cooperación con el misterioso accionar de Dios. Impulsos los cuales siempre tienden a encontrar lo que se ha perdido y a liberar lo que ha estado esclavizado". "Las personas eran y son lo más importante para Jesús. A El le interesa el ser humano en su totalidad, sus problemáticas, dificultades, necesidades, enfermedades, soledad, indecisiones, depresiones, sus ataduras a hábitos sofocantes y sus relaciones destructivas. Y los seguidores de Cristo, deben entregarse por completo a las personas. Cuando se ama a las personas y se les sirve, se les guía y se orientan en medio de su desenfoque de vida, se restaura al caído, se sana al herido y se ayuda a que los no desarrollados de desarrollen en todo el potencial espiritual". "Si crees en realidad en el poder redentor y transformador de la presencia de Dios en la vida de una persona, el único y mayor regalo que puedes darle a alguien es la explicación de cómo estar conectado de la manera correcta con El. Cuando permitas que tu mayor preocupación en la vida sean las personas, descubrirás que cuando Cristo te pide algo, estarás dispuesto a abandonar el círculo de comodidad y seguirás Su dirección, porque recordarás que Cristo así lo hizo «quien, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo y tomó forma de siervo, y se hizo semejante a los hombres - Fil 2:6-7 (RVC)» Para rescatarte y transformarte, y ser la provisión de todas tus necesidades". "«el que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor -1 Jn 4:8 (NTV), Si alguien... ve a un hermano en necesidad pero no le muestra compasión, ¿cómo puede estar el amor de Dios en esa persona? - 1 Jn 3:17 (NTV), Haz a los demás todo lo que quieras que te hagan a ti - Mt 7:12 (NTV)»". "El ser humano, tiene una gran importancia para Cristo, ¿y para ti, lo tiene?, se uno que impacta en amor a otros y veras la diferencia en otros". «Les di mi ejemplo para que lo sigan. Hagan lo mismo que yo he hecho con ustedes - Jn 13:15 (NTV)». «Si Dios no se guardó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿no nos dará también todo lo demás? - Rom 8:32 (NTV), De modo que ustedes también están completos mediante la unión con Cristo - Col 2:10 (NTV)».
"Apropiarse es tomar para sí alguna cosa haciéndose dueño de ella, es hacer nuestro lo que Dios ya ha otorgado". "El hecho de que seamos creyentes los cuales reinan sobre la vida y las circunstancias es el resultado directo de el reinado de Cristo en y sobre nosotros (Efe 3:16-21). Si Él reina en nosotros, nosotros reinamos en la vida (2 Tim 2:11-12, Rom 6:12, v.16, v.18, v.22)". "Si algunos se convierten en personas sumamente espirituales y otros no, es porque algunos han sido receptores mientras que otros han permitido que la gracia más que suficiente de Dios permanezca inactiva en sus vidas. La apropiación se hace cargo de los hechos de Dios y los convierte en factores de la experiencia en la vida del creyente, nuestro gozo de las bendiciones espirituales está estrictamente limitado a nuestra aprobación de las mismas. Gozamos no de lo que ansiamos, o esperamos, o incluso pedimos, sino de lo que recibimos. Podemos suspirar por una experiencia toda la vida, pero se vuelve nuestra solo cuando nos apropiamos de la seguridad de Su promesa ". "Se dice que hay treinta mil promesas realizadas al hijo de Dios (creyente), pero que no tienen más valor para nosotros que los titulares del periódico si no nos apropiamos personalmente de ellas. En la Ciudad de Pennsylvania se encuentra la estatua de su fundador, William Penn , él estaba en buenos términos con los indios y en reconocimiento por su bondad un día le dijeron que le iban a dar tanta tierra como él pudiera caminar sobre ella por un día, él tomó su palabra. A la mañana siguiente se levantó muy temprano y caminó todo el día y regresó tarde en la noche. Le esperaba un grupo de indios con sonrisas burlonas en sus rostros, pero cumplieron su promesa, y Penn recibió toda la tierra que ahora es la ciudad de Philadelphia, si esos indios fueron capaz de cumplir su promesa. ¿Dios va a ser menos fiel a las Suyas? «Dios no miente, su promesa y su juramento no pueden cambiar - Heb 6:18 (NTV)»". "No es tan sólo creer en Su amor, sino recibirlo en apropiación lo que llevará al creyente a gozar del mismo, no es tan sólo creer en Su perdón, sino recibirlo en apropiación lo que llevara al creyente a la paz de Él y con Él, no es tan sólo creer que Dios tiene algo para nosotros, sino apropiarnos de ese algo y será de nosotros (Rom 8:17, Gál 3:26, 4:7, Tit 3:7) «creyendo que ha de suceder lo que dice, entonces sucederá - Mr 11:23 (DHH), obtendremos sólo lo que tomamos. Hay un mundo de diferencia entre la fe que pide y la fe que se apropia»". «Todas las riquezas de la sabiduría y del conocimiento se encuentran presentes en Cristo - Col 2:3 (TLA). Y todas las promesas que Dios ha hecho se cumplen por medio de Jesucristo - 2 Cor 1:20 (TLA). Son hijos de Dios. Y como son sus hijos, gracias a él tienen derecho a recibir su herencia - Gál 4:7 (TLA)». «Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo - Lc 14:33 (RV60)».
"El termino "discípulo" significa "aprendiz", la palabra implica la idea de alguien que aprende algo con el propósito de traducir las lecciones en acciones". "Una vez que el creyente está convencido de la majestad y gloria del Cristo al que sigue y de la causa en la que está involucrado, estará dispuesto a hacer cualquier sacrificio. Cristo estableció las condiciones indispensables del discipulado, un amor sin rival, un toque a la conducta de vida y un toque a las posesiones personales (Lc 14:26-27). Una renuncia incondicional. Una entrega total de todo, no una entrega parcial de mucho, la "renuncia" incluye "entrega a", "decir a dios a" resume totalidad que no admite excepciones. Él reclama el derecho de disponer todo en la posesión de sus discípulos como Él considere mejor en su sabio amor". "Ese amor sin rival toca los afectos del corazón «Si alguno viene a mí, y no aborrece a - Lc 14:26 (RV60)» es decir, que sólo se puede ser discípulo de Cristo si se le ama más que a nadie, seguirlo implica un choque de lealtades, "aborrecer" tiene como sentido un uso relativo, no absoluto y simplemente significa "amar menos". Ser discípulo de Cristo trae consigo la discordia con los demás y el ostracismo social, no por que queramos, sino por lo que somos «El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán - Jn 15:20 (RV60)», pero mientras más le amamos a Él más amaremos a quienes nos detestan". "El amor por Él debe triunfar sobre el amor instintivo por nosotros mismos, y aun también sobre la propia vida «pero mi vida no vale nada para mí a menos que la use para terminar la tarea que me asignó el Señor Jesús - Hch 20:24 (NTV)»". "Para obedecer tales exigencias se necesita un motivo poderoso. El cual se haya en el ejemplo de Cristo (Jn 13:15). Por amor a nosotros Él "aborreció" a Su Padre, en Su hogar celestial, y vino como Dios-hombre sin pecado a vivir en un mundo de pecado donde con frecuencia Él no tenía donde recostar Su cabeza. Por nuestro bien, cargó Su cruz (Jn 19:17-18). Para nuestro enriquecimiento eterno Él renunció a todo lo que tenía (2 Cor 8:9). ¿Es el siervo más que su Señor? ¿debemos ser renuentes a hacer por Él lo que Él estuvo dispuesto a hacer por nosotros? Cuando el creyente cumpla por el poder del Espíritu con estas exigencias divinamente elevadas, entonces, y sólo entonces, será de hecho reconocido como Su discípulo". «Haya, pues, en [entre] ustedes esta actitud (esta manera de pensar) que hubo también en Cristo Jesús - Filp 2:5 (NBLH)». |